En el interior de cada vehículo yace un elemento esencial para su funcionamiento óptimo: el aceite. Este líquido desempeña un papel crucial en el mantenimiento y la longevidad del coche, debido a que mantiene lubricado el motor, especialmente las partes metálicas que interactúan y están expuestas a la fricción constante. Por ello, en este artículo se explicará cómo elegir el mejor aceite de motor para el coche y cómo cambiarlo de manera independiente.
Homologación del fabricante
Lo primero que se debe tener en cuenta es la homologación del fabricante que se encuentra en el manual del coche. Cada automóvil requiere un tipo diferente de aceite de motor, ya que cambian las viscosidades, las temperaturas y los aditivos. Por ello, es necesario revisar la homologación y luego compararla con la información encontrada en la etiqueta del aceite.
Viscosidad y temperatura del aceite de motor
Una vez que se tenga la etiqueta en mano, se deben revisar los códigos que se parezcan a los siguientes: 0W30, 10W40, 15W40, 15W50, entre otros. El primer número indica el dato de viscosidad en frío, mientras que el segundo indica la viscosidad en caliente, es decir, qué tan fluido o denso será un aceite. Cabe destacar que los números de viscosidad no se refieren a la temperatura, sino a los índices de la tabla SAE presentada a continuación:
Se puede decir que cuanto menor sea la cifra de viscosidad en frío (W), más adecuado será el aceite de motor para su uso en climas particularmente fríos, mientras que cuanto mayor sea el número de viscosidad en caliente, el aceite será más adecuado para uso en altas temperaturas.
Clasificación del aceite de motor
Al elegir el aceite de motor, existen otras abreviaturas que también se deben tener en cuenta. Estas son las especificaciones API y ACEA, las cuales se muestran en todos los paquetes.
API
Es la clasificación según el American Petroleum Institute, una asociación de productores petroquímicos estadounidenses. La especificación API consta de dos letras acompañadas de un número. El primero indica si el aceite está destinado a un motor de gasolina (S, servicio) o diésel (C, comercial), mientras que el segundo representa el rendimiento del aceite del motor. En los motores diésel, la sigla va acompañada de un número que indica a qué motor está destinado, por ejemplo: CF-2 para motores de 2 tiempos o CF-4 para motores de 4 tiempos.
ACEA
Es la clasificación según la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles. También en la especificación ACEA encontramos una combinación de letras y números:
- A/B para vehículos privados de gasolina o diésel
- A/B1 para el uso de aceites de baja viscosidad
- A/B3 para motores con intervalos de drenaje prolongados
- A/B4 para motores con inyección directa
- A/B5 para motores con intervalos de drenaje prolongados
- C también apto para motores con postratamiento
- E para vehículos comerciales
También hay productos genéricos en el mercado que no tienen descripción, tales como los productos con precios muy baratos. Lamentablemente, se corre el riesgo de arruinar el coche, ya que el problema asociado con el uso de aceite de motor de bajo costo es que puede quemarse al depositarse en la válvula y los pistones.
¿Con qué frecuencia se debe cambiar el aceite de motor?
Es importante cambiar el aceite de motor cada 15.000 km para los coches de gasolina y cada 25/30.000 km para los modelos diésel. Si el automóvil se usa con poca frecuencia, aún es recomendable cambiarlo al menos cada 2 años.
Controles a tener en cuenta
Control del aceite de motor
La luz de advertencia de aceite controla el nivel de aceite del motor y se enciende cuando la presión del aceite es baja. En estos casos, es recomendable parar el vehículo lo antes posible y rellenar o cambiar el aceite. Es necesario resaltar que el aceite viejo debe llevarse a un centro de recogida de aceite usado, ya que está prohibido eliminarlo de forma independiente.
Control del líquido refrigerante
Otro aspecto a tener en cuenta es el líquido refrigerante o anticongelante del automóvil. Dicho líquido es un hidrocarburo compuesto por agua y etilenglicol y tiene la función de enfriar los componentes del motor, dirigiendo el calor a través del radiador. Los refrigerantes se dividen en dos categorías o colores:
- El refrigerante rojo (OAT, Organic Additive Technology), compuesto por aditivos de origen orgánico y apto para motores de gasolina y diésel de alto rendimiento.
- El refrigerante rojo (OAT, Organic Additive Technology), compuesto por aditivos de origen orgánico y apto para motores de gasolina y diésel de alto rendimiento.